Al atardecer del 31 de diciembre y escuchando con alegría el IV concierto para piano de Beethoven, de una caja maravillosa que me regalé para Navidad, quiero manifestarle mi más afectuoso saludo. No soy muy amigo del Año Nuevo, pero siempre es bueno volver a empezar, reasumir, descubrir los errores y reconocer la senda extraviada. Siempre hago este saludo, ejercicio,… (more…)