La semana estuvo marcada por unos temblores pequeños, la no aparición de la niña extraviada, el hallazgo en México de un abusador de menores que estaba en fuga y que no es cura, pero sobre todo por la novela “Pinto”. Un amigo que aprecio me decía con dolor y verdad: “nos robaron la alegría”. He pensado mucho en esto. Como… (more…)